Hojas: Las hojas son cilíndricas, largas, de color azul plateado, y tienen una textura cerosa. Crecen de forma erecta o ligeramente arqueada.
Flores: Produce pequeñas flores blancas o amarillentas en forma de racimos al final de tallos largos, aunque no florece con frecuencia.
Crecimiento: Es una planta de crecimiento rápido, que se extiende y forma densas matas.
Condiciones de Cultivo:
Luz: Prefiere pleno sol para mantener su color azul intenso, pero también puede tolerar sombra parcial.
Suelo: Requiere suelos bien drenados, preferiblemente arenosos o con buena cantidad de materia orgánica. No tolera suelos encharcados.
Riego: Necesita riegos moderados. Durante el verano, se debe regar cuando el suelo esté completamente seco. En invierno, el riego debe ser mínimo para evitar la pudrición de las raíces.
Temperatura: Prefiere climas cálidos y secos. Tolera ligeras heladas, pero en climas muy fríos es mejor protegerla o cultivarla en macetas que se puedan mover al interior.
Usos y Aplicaciones:
Ornamental: Es popular en jardines de rocas, jardines xerófitos, y como cobertura del suelo debido a su atractivo color y su bajo mantenimiento.
Macetas y Contenedores: Ideal para cultivar en macetas y contenedores, sola o en combinación con otras suculentas.
Erosión del Suelo: Utilizada para la estabilización de suelos debido a su crecimiento denso y rastrero.